martes, 12 de octubre de 2010

TWENTY BOY SUMMER



-Su cuerpo está aquí conmigo, sus pies dejando huellas en la arena mojada, pero sus ojos están a un millón de años de distancia, nadando con algunas criaturas prehistóricas mientras arena, piedras y huesos minúsculos se prensan juntos y se reducen en partículas pequeñas por separado, la naturaleza moviéndose lentamente hacia adelante, infectada por las idas y venidas insignificantes de la vida humana. De repente me siento muy pequeña, más pequeña y menos importante que los granos de arena bajo nuestros pies, y estoy simultáneamente consolada y humillada.


-A veces, pienso que todos nos sentimos culpables de ser felices, y tan pronto cuando nos atrapamos a nosotros mismos actuando como si todo estuviera bien, alguien se acuerda de que no lo está.


-No quedaba nada que ver. Sucedió lo que era imposible y hermoso, y luego terminó incluso antes de que realmente comenzara, sin dejar nada atrás, sólo los secretos y los corazones rotos.


Por: Sarah Ockler en su libro Twenty boy summer

1 comentario: